Mario Casas ve poco factible trabajar en Hollywood a corto y medio plazo y ve más probableparticipar en alguna producción cinematográfica en Europa, especialmente en Francia o Italia. Así de claro lo tiene el actor, que ha viajado a Alicante para recibir esta noche un premio a futura promesa que otorga el festival de cine de esta ciudad.
Ante este panorama, ha apuntado que su idea es acabar la tercera temporada de El Barco para después tomarse con calma un posible futuro proyecto, ya sea en cine o televisión, si es que tiene "la suerte" de que le ofrezcan un papel.El joven coruñés tuvo tiempo para decir que "la crisis afecta a todos por igual. Ahora hay muy poco cine porque a los productores les resulta muy complicado tirar un proyecto para adelante".
El inglés, una asignatura pendiente para Casas
De igual modo, ha manifestado que lo que más le apetece en estos momentos es empezar a estudiar inglés, "una asignatura pendiente", aunque sólo sea para poder ir a otros países, poder comunicarse y hablar.
"Trabajar en las grandes producciones norteamericanas no es un objetivo por ahora". Más adelante, si me llega algún casting o prueba, lo intentaría y probaría". Aunque ve más cercano trabajar en países más cercanos por el momento.
La mala situación económica hace que Casas sitúe la televisión como una especie de refugio, algo común para muchos actores que van a tener difícil encontrar trabajo en el cine durante este año y el que viene.
Tras recordar que la mayor inseguridad del actor es desconocer si será llamado, ha comentado que si dejaran de llegarle propuestas se "buscaría la vida", quizá en tareas de producción, y ha incidido en que lo que más miedo le produce es "ver a actores de toda la vida que no están trabajando ahora".
Casas considera que la pequeña pantalla "cada vez es más digna", sobre todo por la calidad de las series, y por ello no le molesta que le puedan etiquetar como "actor televisivo".
"La televisión es una gran escuela y me ha dado la oportunidad de hacer cine", ha proseguido antes de desvelar que la comedia le resulta el género "más incómodo", porque existe una "línea muy delgada" entre la buena interpretación y el caer en un personaje "estrambótico y no real".
La fama, una compañera incómoda
Casas, muy mediático y con muchas seguidoras, también ha tenido tiempo para hablar de la fama, sobre lo que ha comentado que intenta "llevarlo bien" aunque a menudo le incomoda "no poder salir a tomar algo o pasar desapercibido por la calle".
Pese a ello, ha admitido que sus legiones de fans le han aupado al lugar que ocupa ahora y ha dicho que, por ello, les está agradecido.
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